fbpx
¡TIENDA ONLINE! Envío gratuito a toda España

existentialcomicscabecera

existentialcomicscabecera

botonSIG

Dragones y Mazmorras y Filósofos

Casi la mitad del tiempo que invertí dando forma a este cómic lo he pasado tratando de dibujar de manera exacta el pelo de Simone de Beauvoir, y aun así al final ha quedado terrible. Ninguna disculpa por el cabello de Derrida, sin embargo, pues no hay artista vivo que pueda inmortalizar tan gloriosa melena.

¿No lo has pillado?

Simone de Beauvoir fue una filósofa existencialista, además de pareja de Sartre durante toda su vida. Su discurso hace referencia a La ética de la ambigüedad, escrito por ella y uno de los trabajos más importantes de la ética existencialista. En él describe cómo la ambigüedad de cada situación conduce a la ansiedad en el sujeto, ya que se ve forzado a actuar sin conocer qué es lo correcto, o incluso qué es lo que de verdad quiere hacer. Cualquier intento de delimitar el mundo o la moralidad en algo concreto y definible está destinado a fracasar, tanto en la práctica (aún caeríamos en la ambigüedad de cómo aplicar las reglas) como en la teoría (las reglas objetivas no pueden suplantar a las decisiones libres subjetivas, en tanto que se erigen moralmente sobre la subjetividad). Para superar esta ansiedad y convertirse en un agente moral, se debería aceptar la ambigüedad y actuar como a uno le parezca.

La parte de Sartre se refiere a la fenomenología, el estudio de las estructuras de la experiencia. A través de Husserl, Sartre comenzó a poner entre paréntesis (es decir, a dejar de lado) cuestiones metafísicas como la existencia del mundo exterior u otras mentes, para centrarse en la experiencia en sí misma. Si dispusiera de más espacio podría decir que porta el «amuleto de Husserl de la fenomenología», ya que el concepto está más ligado a Husserl. Su diálogo con Kant gira en torno a la idea de que vivimos en «mala fe» (mintiéndonos a nosotros mismos, básicamente), pues negamos nuestra libertad intentando seguir las reglas implacables que debemos seguir, como si hubiéramos prestado juramento previo.

El discurso de Kant remite a su imperativo categórico, según el cual un acto no es moral si incurre en una contradicción universalizada. Para Kant, mentir es un ejemplo de manual; si todos mintiesen nadie creería una palabra de lo que dicen los demás, y mentirse a sí mismo no tendría sentido; para Kant esto significa que mentir siempre está mal. Kant fue entonces retado con la cuestión de qué haría en caso de que hubiera un asesino en la puerta, ¿encontraría aceptable mentirle sobre el paradero de su víctima? Kant se enrocaría y sostendría que a pesar de todo no podría mentir al asesino, pues mentir está siempre mal. El resto de su diálogo navega por aguas similares, como la consecución de sus deberes o la obligación de cumplir sus juramentos, necesarias en la filosofía de Kant.

Foucault se dio a conocer en los comienzos gracias a sus investigaciones «genealógicas» acerca de las diferentes fuerzas que operan en nuestra sociedad, por ejemplo sobre cómo castigamos a los criminales, tratamos las enfermedades mentales o entendemos la sexualidad. Una investigación genealógica es básicamente un recuento cronológico de las ideas, generalmente, en el caso de Foucault, desde el prisma de las estructuras de poder. El cómic tiene como referencia más cercana Locura y civilización, que menciona específicamente a los leprosos, y cómo los locos ocuparon su posición ideológica en los albores de la Europa moderna según la lepra empezó a hacerse menos común. Foucault se consideraba anarquista, y luchó por el derecho a formar grupos de autogobierno y a liberarse de la opresión ejercida por grupos más poderosos.

Derrida fue un postestructuralista (como Foucault), y es conocido principalmente por sus críticas a los conceptos de lenguaje y significado. El estructuralismo, en esencia, explica que entendemos el significado de las palabras por cómo se relacionan con las demás palabras, en oposición. Así, por ejemplo, podríamos entender qué significa «mal» en cuanto se opone a «bien», pero sin la oposición de bien no podríamos entender el mal por sí mismo, ya que su significado está sujeto a contraste con el resto de palabras. El postestructuralismo, tal y como yo lo entiendo (no muy bien) es una crítica interna y estructuralista del estructuralismo mismo. Declara que incluso la estructura de las palabras no es adecuada para entender el significado de una palabra, pues el significado de una palabra siempre depende de su contexto, tanto actual como histórico, y ese contexto no es nunca estable. Por lo tanto es imposible que las palabras posean un significado estático o puedan ser comprendidas en su totalidad.

Filósofos en este cómic:
De la serie:
Más tiras de:

Esta tira es una adaptación al castellano de la original, de la serie Existential Comics, cuyo autor es Corey Mohler.